La competencia laboral es aguerrida, el trabajo no termina cuando se consigue un empleo, porque las empresas quieren que sus colaboradores se sigan preparando y al mismo tiempo trabajen para ellos.
¿Vale la pena estudiar y trabajar al mismo tiempo? Para que esta odisea realmente represente una satisfacción primero personal y después profesional, nos gustaría compartirte algunas recomendaciones.
Somos seres humanos, con grandes virtudes y también muchas carencias, no somos perfectos y si prestamos la suficiente atención, siempre podemos aprender de nuestros errores.
¿Por qué mencionamos todo esto? Porque si decides emprender el camino de estudiar y trabajar al mismo tiempo, debes aprender a equilibrar tu vida como estudiante, profesionista y una persona ordinaria que busca divertirse.
Para que esto pueda volverse una realidad, es indispensable que pongas límites. Si intentas cumplir con todo al 100%, lo más probable es que falles en el proceso, te sientas frustrado(a) y abandones el estudio, trabajo o ambos.
Poniendo estos límites, es posible que manejes mejor tus tiempos y completes en su totalidad todos tus proyectos, estableciendo tiempos de entrega parciales, que al final contribuyen para llegar a la meta final.
Si debes estudiar una maestría, especialidad, segunda carrera o doctorado, a solicitud de las políticas de tu lugar de trabajo; es fundamental que establezcas con tu compañía un ajuste en la distribución y carga de trabajo, porque parte de este tiempo deberás usarlo para estudiar y hacer entregas escolares.
Por otro lado, si es una iniciativa propia la meta de estudiar alguna especialidad o diplomado, conversa con tu jefe o jefa directo, para hacerle ver las ventajas competitivas, de productividad y beneficios adicionales que obtendría la empresa si te permiten combinar ambas actividades.
Aquí es donde debes poner todo tu poder de convencimiento, para conseguir la aprobación.
En países como Canadá y otros pequeños en Europa, son de las naciones modelo en donde las empresas tanto públicas como privadas, ofrecen el beneficio de combinar el estudio con el trabajo, pudiendo incluso tomarse un período de ausencia para las actividades laborales, mientras se compruebe que se estudia.
Pero, estamos en México. Esto no quiere decir que el panorama sea menos favorable, por el contrario, hoy en día existe mayor flexibilidad entre las empresas y las instituciones educativas para que las personas puedan estudiar y seguir trabajando.
Por ejemplo, la Universidad Intercontinental tiene un programa de convenios con varias empresas, para ofrecer programas educativos desde licenciaturas hasta posgrados 100% en línea o a distancia, facilitando la exigencia de prepararse académicamente, sin dejar de percibir un salario.
Si te interesa conocer más acerca de estas facilidades, puedes llamarnos a los números (55) 5487-1370 al 79; escribirnos vía WhatsApp o mandarnos un mensaje a nuestra página oficial en Facebook.