A propósito del mes del amor, hablemos un poquito más acerca de eso que todos hemos sentido.
Todos nos hemos enamorado sí o sí al menos una vez en la vida. Aquello que llaman amor es una sensación bonita y una experiencia inigualable.
Veamos. Todo empieza cuando conoces a la persona, te gusta, comienzan a salir y la quieres ver cada vez más seguido.
Después, vienen las mariposas en el estómago y revolotean tan sólo con pensar en ella. En tu cabeza ya no existe otro pensamiento más que esa persona. No quieres hacer otra cosa que no sea estar con ella. ¿Te ha pasado? Si tu respuesta es sí, en definitiva te has enamorado.
Sin duda, el amor es aún más profundo de lo que parece. Entonces, ¿qué es lo que sucede realmente cuando estamos en esa etapa de enamoramiento, que nos regresa a nuestros años “mozos” en la secundaria? ¿Quién no quisiera regresar a esa época tan bonita? ¡Ah, qué tiempos!
El enamoramiento es un estado emocional complejo que involucra procesos cerebrales, hormonales y fisiológicos. Te invito a que conozcamos un poco más de cómo funciona el tema del amor, pero a nivel científico.
Activación de la amígdala. La amígdala es una estructura cerebral que juega un papel importante en la regulación de las emociones. Durante el enamoramiento, la amígdala se activa en respuesta a la presencia o la simple imagen de la persona amada (lo que mencionábamos líneas arriba). Esto puede desencadenar una serie de emociones intensas, como la felicidad, el deseo y la pasión.
Liberación de hormonas. Cuando estás enamorado, el cerebro libera una serie de hormonas, como dopamina, norepinefrina y oxitocina. Particularmente, la dopamina juega un papel importante en el amor, es decir, en la sensación de placer y recompensa. De hecho, se ha demostrado que esta hormona aumenta con la presencia de la persona amada.
Por otro lado, la norepinefrina puede desencadenar una respuesta de “lucha o huida”, lo que explica por qué las personas enamoradas pueden sentirse nerviosas o ansiosas en presencia de la persona amada. La oxitocina, también conocida como la “hormona del amor“, se libera durante el contacto físico y la intimidad, lo que puede fortalecer los vínculos emocionales entre las personas.
Activación de áreas cerebrales específicas. Estas áreas incluyen el sistema de recompensa del cerebro, la corteza prefrontal y la ínsula, que están implicadas en la toma de decisiones, el procesamiento de la información social y emocional y la conciencia corporal, respectivamente.
Cambios fisiológicos. Además de los cambios neuronales y hormonales, el amor también produce cambios fisiológicos, como el aumento del ritmo cardiaco, la sudoración y la dilatación de las pupilas. Estos cambios pueden ser el resultado de la activación del sistema nervioso autónomo, que regula las funciones corporales involuntarias.
El enamoramiento es tan sólo la etapa inicial de un vínculo amoroso o de pareja.
En otras palabras, el amor y el enamoramiento son dos estados emocionales diferentes que pueden coexistir en una relación romántica, pero que tienen características distintas. Mientras que el enamoramiento se centra en la pasión y la atracción inicial, el amor es un sentimiento más duradero y profundo que se basa en una conexión emocional significativa con la otra persona.
En resumen, el enamoramiento es un estado emocional complejo que involucra una serie de procesos neuronales, hormonales y fisiológicos. Aunque el enamoramiento puede ser intenso y emocionante, también puede ser una experiencia compleja y desafiante, ya que involucra no solo la emoción, sino también la cognición y la percepción.
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