El Día Mundial del Medio Ambiente nos permite reflexionar sobre cómo podemos proteger y preservar nuestro entorno desde la arquitectura.
En ese sentido, la arquitectura juega un papel fundamental, ya que puede tener un impacto significativo tanto en el mundo, como en la calidad de vida de las personas. ¿Pero cómo la arquitectura puede ayudar al medio ambiente?
Los edificios verdes están diseñados para reducir el consumo de energía y minimizar el impacto ambiental. Según el World Green Building Council, los edificios sostenibles pueden reducir hasta un 30 por ciento las emisiones de gases de efecto invernadero en comparación con los edificios convencionales.
Además, el uso de tecnologías como paneles solares, sistemas de recolección de agua de lluvia y sistemas de ventilación natural puede ayudar a optimizar el uso de los recursos naturales.
Los materiales sustentables, como el bambú, la madera certificada y los ladrillos ecológicos, tienen un menor impacto ambiental en comparación con los materiales convencionales, como el acero y el hormigón.
Por ejemplo, la producción de cemento, que es un componente clave del hormigón, genera grandes cantidades de dióxido de carbono.
Según datos de la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos, la industria del cemento es responsable del cinco por ciento de las emisiones globales de dióxido de carbono.
Esto deja ver la importancia en la elección de materiales, pues es una manera de reducir la huella ambiental.
Otras acciones que abonan a una arquitectura más responsable son:
El uso inteligente de la luz solar, la orientación adecuada de los edificios y la incorporación de espacios verdes pueden mejorar la eficiencia energética de una estructura.
Por su parte, los espacios verdes pueden reducir la contaminación del aire, mitigar el calor y mejorar la calidad de vida.
Renovar y mejorar edificios ayuda a reducir el desperdicio de materiales y energía. Según un informe del Urban Land Institute, la rehabilitación de edificios puede ahorrar hasta un 50 por ciento de energía en comparación con la construcción de nuevos edificios.
Los edificios diseñados con atención a la iluminación natural, la calidad del aire interior y la comodidad térmica pueden mejorar la productividad, reducir los problemas de salud relacionados con el entorno y promover una mayor conexión con la naturaleza.
Estudios han demostrado que la exposición a espacios verdes puede reducir el estrés y mejorar la salud mental.
El papel del arquitecto
La arquitectura desempeña un papel fundamental en la protección del medio ambiente y la construcción de un futuro sostenible.
Por medio del diseño sostenible, el uso de materiales ecoamigables, la integración de espacios verdes y la rehabilitación de estructuras existentes, es posible reducir el impacto ambiental.
Así que, como futuro profesional de la arquitectura, es importante que te comprometas con prácticas responsables que promuevan la sostenibilidad y el respeto por el medio ambiente.
Sigamos celebrando el Día Mundial del Medio Ambiente tomando acciones que garanticen un futuro habitable para todos.
Si te interesa el tema, en la UIC tenemos el Diplomado en línea Entornos Interiores: Diseño, Sostenibilidad y Bienestar.
Para saber más
Diplomado en línea Entornos Interiores: Diseño, Sostenibilidad y Bienestar. Disponible en https://educacionenlinea.uic.mx/diplomados-en-linea/programas/diseno-de-interiores.html
http://catarina.udlap.mx/u_dl_a/tales/documentos/lar/martagon_rosado_m/capitulo-4.pdf