Pensar en la vida, es tener presente que la misma llegará a un final. Hay quienes lo toman con naturalidad, pero en la mayoría de los casos, no es así, porque nunca se nos preparó y siempre se nos censuró el tema de la muerte, como si no existiera o fuera algo improbable de ocurrir.
Para esta misión es que aparece la tanatología. Claramente, no tiene un camino sencillo por recorrer y es que la muerte duele, incomoda, enoja, desilusiona y sobre todo vulnera a los que sobreviven a la pérdida.
Actualmente, la tanatología tiene la misión de abordar el tema de las pérdidas y las ausencias derivadas de diferentes sucesos, no solo por un acontecimiento de fallecimiento y es por eso que, tiene una estrecha relación de colaboración con la psicoterapia.
La tanatología es una disciplina que, al comienzo, tenía por objetivo solo ocuparse del campo de estudio relacionado con la muerte y las acciones asociadas a ella.
El origen del término proviene del griego >thanatos< que significa muerte, y >logos<, estudio.
La Dra. Elisabeth Kübler-Ross es considerada la pionera en este campo y fue ella quien propuso las cinco fases que suelen experimentar las personas que viven el acontecimiento de muerte de un ser querido:
En la actualidad, se sabe que estas fases no suelen experimentarse en este orden, cada individuo vive el proceso de la pérdida de diferente manera y puede pasar un tiempo indefinido en cada una de ellas.
El campo de estudio de la tanatología no es aislado, de hecho, es interdisciplinario y se relaciona sobre todo con las áreas de la salud como la medicina y la psicología.
El enfoque actual de un tanatólogo está orientado a ofrecer las herramientas y un espacio seguro para poder atravesar y resignificar cualquier proceso de pérdida o ausencia, que no deriva exclusivamente de la muerte.
La tanatología actual entiende que, las pérdidas pueden originarse por diferentes casusas como:
Considerando estos posibles escenarios, los especialistas que abordan la disciplina tanatológica, pueden ser psicólogos, psicoterapeutas e inclusive médicos especialistas en enfermedades terminales, que desarrollan la sensibilidad y adquieren las herramientas para ayudar a otros a enfrentar las pérdidas.
La tanatología en México se desenvolvió como campo de estudio gracias al Dr. Alfonso Reyes, quién fue alumno de la Dra. Kübler-Ross.
En nuestro país, el Dr. Reyes es considerado el pionero de la tanatología y uno de los muchos logros destacables que tuvo fue fundar la Asociación Mexicana de Tanatología A.C., el 18 de noviembre de 1998.
Convertirse en tanatólogo, es por lo general un objetivo que comparten profesionales como:
Los tanatólogos suelen ser especialistas con conocimientos previos en áreas médicas y de salud, sin embargo, personas con estudios en áreas humanistas y sociales, interesadas en el manejo de duelos y pérdidas, también pueden volverse especialistas.
Para convertirse en un especialista en este tema, una de las mejores opciones educativas está en la UIC.
Su diplomado, Tanatología: El reto en tiempos de vacío y violencia, con una duración de 80 horas en modalidad a distancia, tiene un plan de estudios actual y dinámico que le permite a los participantes:
Desarrollar habilidades y convertirse en agentes facilitadores en el proceso del duelo y así ayudar a las personas que sufren una pérdida individual, familiar o material.
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