La enfermedad de Alzheimer es una condición neurodegenerativa progresiva que afecta procesos cognitivos como la memoria, el lenguaje, la orientación, el juicio y la capacidad de tomar decisiones. Estos cambios no solo transforman las funciones mentales, sino también la identidad, la autonomía y la forma en que la persona se relaciona consigo misma y con su entorno.
En caso de estar en una situación, en donde un familiar o alguien muy cercano presente esta enfermedad, nos lleva a preguntarnos cómo cuidar a una persona con Alzheimer y lo que implica acompañar los efectos de la enfermedad.
Sostener los vínculos afectivos puede resultar en un reto, así como mantener la dignidad, la historia personal y las elecciones de la persona mayor. Por eso, preparamos esta guía En esta guía que aborda recomendaciones prácticas para familiares y cuidadores, integrando principios éticos y elementos gerontológicos presentes en una formación multidisciplinaria.

Aunque existen múltiples tipos de demencias, el Alzheimer es la más frecuente. Se caracteriza por el deterioro progresivo de las funciones superiores, afectando tanto los aspectos cognitivos como afectivos y sociales.
Afectaciones comunes en etapas iniciales:
En etapas intermedias o avanzadas puede presentarse:
Comprender estas fases permite entender cómo cuidar a una persona con Alzheimer y acompañarla desde la empatía, y no desde la frustración.
La comunicación afectiva es una de las áreas donde más se resiente el vínculo. La intención principal no es corregir información o acciones, sino generar seguridad emocional.
Estrategias de acompañamiento relacional:
| Necesidad de la persona | Forma de acompañar |
|---|---|
| Orientación y calma | Hablar con tono suave, contacto visual, frases cortas |
| Reconexión afectiva | Evocar recuerdos con música, fotos o relatos significativos |
| Seguridad emocional | Evitar confrontaciones y discusiones sobre lo “real” |
| Sentido identitario | Llamar por su nombre, respetar gustos e historia biográfica |
Este enfoque forma parte de la perspectiva humanista y psicológica del diplomado “La vejez: Un abordaje integral”, con modalidad en línea, para que puedas avanzar en el programa a tu propio ritmo.

El cuidador primario suele asumir funciones de acompañamiento, seguimiento médico, decisiones diarias y contención emocional. Esto puede generar carga física, estrés y duelo anticipado.
Señales de desgaste del cuidador:
Recomendaciones para cuidadores:
Nuestro diplomado en línea contempla el análisis del cuidador primario como parte del abordaje integral de la vejez, y no como un prestador de servicio ajeno a sus propias necesidades o frustraciones que pueda desarrollar en el proceso.

La vida diaria puede volverse más manejable con ajustes simples y progresivos.
Adaptaciones útiles en el hogar:
Promover autonomía sin sobreprotección:
Autonomía y seguridad deben coexistir, no excluirse.
La enfermedad no anula la subjetividad, las personas con esta enfermada siguen viviendo un mar de emociones y hay que estar lo mejor preparados para hacer frente a estos cambios.
Para entender cómo cuidar a una persona con Alzheimer, se requiere una visión y entrenamiento integral que contemple:
Es un proceso humano, no solo clínico.

Nuestro diplomado integra perspectivas sociales, afectivas, psicológicas, éticas y tanatológicas sobre la vejez, para intervenir desde un enfoque humanista y multidisciplinario.
Este tipo de formación puede ser útil para: