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Litigar en el sistema penal acusatorio mexicano


26 mayo, 2025

Desde la implementación del Sistema Penal Acusatorio en México, uno de los mayores desafíos para los abogados ha sido adaptarse a su lógica, sus principios y, sobre todo, a la dinámica de las audiencias orales. Para muchos litigantes, incluso con experiencia previa, litigar en este nuevo contexto representa una serie de retos que no se abordan completamente en la formación universitaria tradicional.

Esta transformación del sistema ha puesto en evidencia una necesidad urgente: capacitarse de forma continua para enfrentar los juicios orales con seguridad, ética y eficacia.

La brecha entre la teoría y la práctica

Uno de los principales motivos por los que muchos abogados no se sienten preparados para litigar bajo el sistema acusatorio.

Uno de los principales motivos por los que muchos abogados no se sienten preparados para litigar bajo el sistema acusatorio es la distancia entre lo aprendido en las aulas y la realidad de las salas de audiencia. La teoría jurídica sigue siendo fundamental, pero en el modelo acusatorio, la argumentación oral, la estrategia procesal y el dominio escénico adquieren un peso determinante.

En este nuevo escenario, no basta con conocer la ley: hay que saber cómo aplicarla frente a un juez, cómo reaccionar ante objeciones, cómo formular preguntas eficaces y cómo presentar pruebas de manera persuasiva.

Litigar exige nuevas competencias

La falta de entrenamiento específico contribuye a una sensación constante de inseguridad o frustración en quienes ejercen el litigio penal.

La transición al sistema acusatorio ha traído consigo un cambio profundo en el perfil del abogado penalista. Hoy, litigar implica tener habilidades distintas: comunicación efectiva, control emocional, rapidez mental y dominio técnico del proceso.

A pesar de ello, muchos profesionales siguen recurriendo a fórmulas tradicionales o improvisan en sala, lo que afecta directamente la calidad de la defensa o la acusación. La falta de entrenamiento específico contribuye a una sensación constante de inseguridad o frustración en quienes ejercen el litigio penal.

¿Cómo prepararse para enfrentar estos desafíos?

Litigar con solidez bajo este nuevo modelo requiere formación práctica, estructurada y actualizada.

La solución no está únicamente en la experiencia empírica ni en el aprendizaje autodidacta. Litigar con solidez bajo este nuevo modelo requiere formación práctica, estructurada y actualizada. Espacios de capacitación como diplomados especializados ofrecen una oportunidad concreta para cerrar esa brecha y fortalecer el perfil profesional.

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